miércoles, 19 de noviembre de 2008

Guadalajara, destino turístico

Como cada semana, al montarme en el tren, abro mi ejemplar de Nexotur ("Periódico profesional de la nueva agencia de viajes", como ellos mismos se denominan) y me sorprendo al ver en página 2, el titular "La fortaleza de Guadalajara como destino turístico". Los pelos como escarpias, oye.

Se trata de un artículo de opinión de Isabel Nogueroles, concejala de cultura y turismo del Ayuntamiento de Guadalajara.

Devoro el artículo por lo insólito, y me encuentro un publirreportaje en el que se desgranan los encantos de la capital de la provincia. Un breve recorrido por el Infantado, Palacio de la Cotilla y Panteón de la Condesa de la Vega del Pozo, una mención al Cuentacuentos, el Tenorio Mendocino y el Solsticio Folk, hueco para hablar (completamente apropiado para un periódico cuyos lectores son básicamente agencias de viajes) sobre la oferta de alojamientos de la ciudad, sin olvidar la gastronomía. En definitiva, un artículo muy completo, en el que, por criticar, diría que echo en falta la imagen de la ciudad como un trampolín para conocer los encantos de la provincia (que podría ser un buen gancho de visitantes) y, por rizar el rizo, que habla de Guadalajara como "capital de la Alcarria". Seguimos liándonos. Por lo demás, impecable. Me alegra ver que Guadalajara deja de pasar desapercibida, al menos por esta vez.

10 comentarios:

Lima dijo...

Con el crecimiento desaforado de la ciudad, cualquier día igual llega hasta la Alcarria.
Pero todavía tiene mucho encanto este pueblo grande de la Campiña.
Salud.

El niño dijo...

Guadalajara pertenece a la Alcarria, al menos en su mayor parte, la alcarria es una formación morfológica que no son sólo sus páramos, la alcarria la comprenden páramos, taludes o laderas y sus valles, por lo tanto, Guadalajara capital está en el límite norte de La Alcarria, en el último valle de la misma, formado por el henares, siendo el límite más nítido (si es que se puede establecer un límite nítido a una formación morfológica tal que esta, que pasa de Alcarria a campiña gracias al trabajo de un río, en este caso el Henares y alguno de sus arroyos, pasando de lo que en un principio fue páramo a las laderas y después a los relieves alomados que encontramos al otro lado del henares, (a este encontramos barrancos y terrazas (igual que los encontramos en el Tajuña o el Ungría) aunque unos cuantos hayan sido destrozados por las nuevas urbanizaciones, pero yo que de peque he jugado y trasteado de Guadalajara al río los recuerdo perfectamente; la cuestión es que en este límite final de La Alcarria el Henares ha metido mucha más caña de la que ha podido meter el Tajuña, pero ahí están los cerros testigo (que también son Alcarria, pero en una fase mucho más evolucionada) y esos dos preciosos restos alcarreños a un lado y otro de la A-2 camino a Torija que tan bien quedan vistos desde Taracena o Iriepal, lo dicho, la alcarria no sólo es el páramo (si fuese así buena parte del sur de la provincia tampoco sería Alcarria, y si no mirad los paisajes alomados existentes cerca del Castillo de Anguix, o la Sierra Ministra) muchos consideran que el límite a la altura de Guadalajara lo pone el Henares, por lo que el barrio de los manantiales ya no serían Alcarria, no obstante, gran parte del término municipal de Guadalajara está en La Alcarria, no sólo en la ladera y el valle sur del henares, sino en el páramo ya que sube al mismo y camina hacia el sur. Guadalajara es alcarreña, no al completo, pero si en parte. Un día que cojáis la A-2, si vais en la Conti mejor que iréis más altos, y en lo que os deje lo que queda sin urbanizar, observad cómo el paisaje es totalmente diferente desde el henares hacia el páramo, que desde el henares hacia Cabanillas, Azuqueca o Alovera.

Saludos

Antuan "LaNota" dijo...

Guadalajara tiene el encanto de.... (poner aquí lo más horroroso que se le ocurra)

La capital, no nos engañemos, no tiene encanto alguno. Sólo son reseñables el palacio del infantado y el panteón. Cuando llevas a gente a ver Guadalajara, es siempre un, uy sí, muy bonito.

Lo bonito de Guadalajara no es su capital, son sus pueblos y paisajes (y mira que me joroba porque yo soy capitalino), e intentar vender otra cosa es un poco absurdo.

Y lima, lo del "encanto de pueblo grande"... pues chica, vete a alcalá a pasear por su centro: eso sí tiene encanto. Lo nuestro no. ¿Qué edificios antiguos o calles conservadas nos quedan? Todas están reformadas, y en todas las reformas se han cepillado lo que antes había. Las restauraciones brillan por su ausencia, y cuando las hay, son completas (y como sabe todo el mudno, las restauraciones deben marcar bien lo anterior y lo nuevo, para poder diferenciar la evolución del edificio), no dejan nada de lo anterior, porque en realidad, entre la guerra civil y el urbanismo desenfrenado nos quitó casi todo.

De verdad, Guadalajara capital no la puedo recomendar para visitar...

Anónimo dijo...

ufff..mira que he paseado por Alcalá y continuo quedandome con Guadalajara

Pero para gustos..

El niño dijo...

pues a mi me ha ocurrido lo contrario, gente que ha dado con personas como tú (me refiero a Antuan) y que cuando han visitado Guadalajara, evidéntemente no te van a decir que es una maravilla maravillosa, pero que tiene su aquel, su puntillo, y que se lo esperaban muchísimo peor por comentarios de gente de Guadalajara. La capital necesita mucho trabajo para acondicionar el centro, pero bien merece una visita como puerta a una provincia realmente maravillosa. Hay ciudades mucho más feas que tienen nombre en el mundo del turismo...

Antuan "LaNota" dijo...

Ahora tienen una oportunidad de dejar algo chulo, a ver si se gastan la pasta y ponen un suelo de cristal en la plaza del ayuntamiento...

Así tendríamos algo más de nuestra historia a la vista, y eso sí que podría generar tb algo más de turismo... pero aun así me quedo con Alcalá... esperemos que sólo de momento...

Vir dijo...

Gracias a todos por vuestros comentarios. Como sabéis, yo soy nacida en Madrid (aunque por accidente), he vivido siempre en Alcalá, ciudad a la que quiero muchísimo, pero me siento alcarreña, de Gajanejos.

No creo que se pueda comparar Alcalá con Guadalajara, pero está claro que cada una de ellas tiene sus encantos. Alcalá es Patrimonio de la Humanidad, y esto ya dice mucho del tipo de ciudad de la que se trata, pero tiene el inconveniente de que no tiene una identidad como ciudad que sí tiene Guadalajara, un arraigo cultural, lingüistico y folklórico que sí tiene Guadalajara.

Para unas cosas prefiero Alcalá y para otras Guadalajara, pero lo que sí es cierto es que, cuando alguien visita por primera vez Guadalajara, reconoce que esperaba menos... no sé si porque algo de encanto tiene o porque las expectativas eran muy muy bajas...

El niño dijo...

bueno, sin tener nada en contra de alcalá, se sobrevalora mucho el hecho de su condición de patrimonio de la humanidad en la que pesó más cervantes y su universidad que el patrimonio tangible real (arquitectónico, etc), hay muchos pueblos con más patrimonio que alcalá... con alcalá pasa lo contrario que con Guadalajara, la gente sale decepcionada, claro, que como comentas, no sé si porque se dan cuenta que no saben de dónde sale su declaración de patrimonio o porque sus expectativas eran muy altas, Alcalá ha destrozado a saco también su patrimonio, dentro de lo que fue su recinto amurallado hay auténticos monstruos, y la "recuperación" de la "catedral" fue, al menos en lo que el exterior se refiere (por dentro no la he visto) simplemente vergonzosa. Necesita mucho trabajo también Alcalá, eso sí, parte con condiciones mucho mejores que Guadalajara, simplemente eso, yo no presumiría de Patrimonio de la Humanidad, para mi no lo merece.

Vir dijo...

Estoy completamente de acuerdo en lo que comentas de que se han hecho muchas barbaridades, y en que seguramente haya otros pueblos y ciudades que tengan más merecida la condición de Patrimonio de la Humanidad que Alcalá, pero creo (y aquí igual me sale la venilla complutense) que Alcalá sí merece la condición (aún sin saber realmente qué requisitos hay que cumplir para serlo), por su Calle Mayor, por el edificio de la Universidad Cisneriana, por los restos de las murallas (aquí sí que seguro que hay miles mejores), por la catedral-magistral, por el Convento de las Bernardas...

Está claro que no podemos comparar Guadalajara con Alcalá, y que tampoco podemos obviar que Guadalajara ha tenido la desgracia de haber perdido la mayor parte de su patrimonio, y que a lo mejor en este caso, como decía, se me "ve el plumero", pero creo que, aunque otras también puedan merecerlo, en este caso Alcalá sí lo merece. A mi, por lo menos, me gusta :)

Anónimo dijo...

El potencial turístico de Guadalajara está en la provincia. Punto. Guadalajara como ciudad no es más que una población de provincias con olor a facha y rancio, que en los últimos años se parece más a Coslada, que a un lugar normal de castilla (Palencia, Soria, Segovia). Todo se lo debemos a dos factores, como son la sempiterna ineptitud de nuestros políticos (desde el chapuzas de Bris, al sieso de Alique, pasando por el actual Antoñito Román, a las futuribles Araceli, y Mari Valeria) y a la PROPIA GENTE QUE LA HABITA. Somos nosotros, los de aquí, los que no exigimos a nuestros políticos que dejen de expoliar el casco histórico, y que dejen de hacer el capullo con el patrimonio. Así que nos lo tenemos bien merecido. ¿Cuales són las alternativas? ¿El teatro? ¿El café concierto, que parece, por quienes la frecuentan una tertulia sacada de "Tiempos Revueltos"? ¿Blanquita, sus coleguitas guays, y sus muchach@s?.
Guadalajara lo que necesita es que se haga nueva otra vez. Y menos mal que está viniendo gente de fuera, que es emprendedora, y que tiene ideas. Los de aquí no nos caracterizamos precisamente por ser innovadores, y sobre todo por echarle valor y hacer las cosas como hay que hacerlas: Bien, y exigiendo que no nos tomen el pelo.